Gabriel Castellón habló sobre el paro indefinido de la Sifup
El Sindicato de Futbolistas Profesionales de Chile (Sifup) ha declarado un paro indefinido que afectará a todos los torneos organizados por la ANFP, incluyendo la Supercopa, la Copa Chile y el Campeonato Nacional. La decisión fue tomada de manera unánime durante la asamblea del sindicato el 3 de enero de 2025.
Paro indefinido de la Sifup
El principal punto de conflicto es la decisión del Consejo de Presidentes de transformar la Segunda División en una categoría Sub 23, una medida que los jugadores consideran “arbitraria e ilegal”. Esta modificación tendría importantes consecuencias laborales para muchos futbolistas profesionales.
Dos figuras destacadas del fútbol chileno han expresado públicamente su apoyo al paro. Gabriel Castellón, portero de Universidad de Chile, enfatizó la gravedad de la situación, señalando que numerosas familias se verán afectadas por la pérdida de empleo de los jugadores. Además, destacó otro problema significativo: los clubes están trasladando a los jugadores la responsabilidad de cubrir sus propias lesiones, lo cual representa un serio problema de salud laboral.
Por su parte, Diego Sánchez, guardameta de Coquimbo Unido, respaldó la decisión del sindicato y mencionó que la problemática se extiende también al cupo de jugadores extranjeros. Ambos jugadores coinciden en la necesidad de mantener una postura firme para lograr cambios efectivos en el sistema.
Castellón fue especialmente enfático al declarar que “el paro no se va a mover hasta que no se puedan cambiar las cosas”, demostrando la determinación del gremio en esta lucha. La unidad entre los futbolistas se presenta como fundamental para alcanzar sus objetivos.
Es importante mencionar que eventos no oficiales, como la Copa Coquimbo programada para el 5 de enero, podrán realizarse ya que no están bajo la jurisdicción de la ANFP.
Futbolistas unidos
Esta situación representa una crisis significativa en el fútbol chileno, donde los jugadores profesionales están unidos en su lucha por condiciones laborales justas y en contra de medidas que consideran perjudiciales para su profesión. La transformación de la Segunda División en categoría Sub 23 se ha convertido en el catalizador de un conflicto más amplio que involucra diversos aspectos laborales y profesionales del fútbol chileno.
