La astucia de la U para cumplir con los minutos juveniles

Universidad de Chile ha encontrado una forma particular para cumplir con la obligación de minutos juveniles en la Liga de Primera 2025, aprovechando un aspecto del reglamento que les permite mantenerse al día sin depender exclusivamente de sus jugadores jóvenes en cancha.
¿Cuál es la estrategia de la U para los minutos juveniles?
Aunque inicialmente se designó a Lucas Assadi como el principal formado en casa para cumplir con esta norma, el jugador solo ha sumado 39 minutos en los tres partidos disputados hasta ahora. Sin embargo, el equipo dirigido por Gustavo Álvarez ha conseguido acumular un total de 228 minutos juveniles gracias a una estrategia alternativa.
Según explicó el periodista Marcelo Díaz de TNT Sports, la U ha aprovechado una cláusula del reglamento que otorga minutos por la participación de jugadores en selecciones juveniles. “En la planilla de la ANFP, en todas las fechas ha partido de la base de 63 minutos”, detalló Díaz.
Esta ventaja se ha materializado de diferentes maneras: “La primera fecha por la participación del Sudamericano Sub 20, la segunda porque llegó un jugador lesionado (Benjamín Aravena). Pero si les nombro Renato Núñez y Benjamín Díaz, son Sub 17. Fueron inscritos en la planilla de la U y fueron citados a la Roja Su17 y sumaron 63 minutos”, explicó el periodista.
Esta estrategia ha permitido que Universidad de Chile no dependa exclusivamente del tiempo en cancha de Assadi, cuya participación ha sido limitada debido a la presencia de jugadores como Leandro Fernández y Contreras, quienes tienen prioridad en el esquema del entrenador.
Juegan sin presión
La situación representa un alivio significativo para Gustavo Álvarez, quien puede continuar con su planificación táctica sin la presión de tener que incluir obligatoriamente a juveniles para cumplir con el reglamento, mientras el club se mantiene al día con la normativa gracias a la participación de sus jugadores en las selecciones nacionales.
Este aprovechamiento del reglamento permite a la U enfocarse en sus objetivos deportivos sin sacrificar rendimiento por la obligación de dar minutos a jugadores jóvenes que quizás no están preparados para asumir un rol protagónico en el primer equipo.