Eduardo Vargas cierra su historia de mala racha y comienza un nuevo ciclo en Nacional
Eduardo Vargas rompió el silencio goleador y también una pesada mochila que lo acompañaba desde su llegada a Nacional. Este fin de semana, el atacante chileno marcó un tanto en la goleada por 4-0 ante Cerro, dejando atrás una prolongada sequía y encendiendo la esperanza de que, por fin, comience un nuevo ciclo en su carrera deportiva. Tras semanas bajo la lupa, el “Turboman” volvió a sonreír y se reencontró con el gol.
El delantero de la Roja no anotaba desde el 22 de febrero, y su bajo rendimiento había generado dudas en la prensa y en parte de la hinchada. Incluso el director deportivo del club, Sebastián Eguren, reconoció públicamente que Vargas “encontró que el fútbol uruguayo es más difícil de lo que parece desde afuera”, durante una entrevista con el canal Punto Penal. Sin embargo, también expresó su confianza en el chileno, destacando su compromiso y profesionalismo.
El tanto de Vargas llegó en el primer tiempo mediante un certero cabezazo, que le permitió desatar su grito contenido y abrazarse con sus compañeros. Fue un desahogo para el exgoleador de la Universidad de Chile y una muestra de que sigue teniendo la categoría para marcar diferencias, incluso en un fútbol tan intenso como el uruguayo. Su actuación fue premiada con una ovación al momento de ser reemplazado a los 65 minutos.
Durante su estadía en Nacional, Vargas ha tenido que lidiar con el escepticismo, la exigencia del medio local y su propia falta de ritmo. Las críticas se intensificaron con el pasar de los partidos, especialmente cuando no lograba marcar ni influir en el juego ofensivo del Bolso. Sin embargo, su gol ante Cerro podría representar el punto de quiebre que necesitaba para recuperar confianza.
El respaldo del club ha sido clave en este momento. Eguren insistió en que “es un tipo tranquilo, extremadamente profesional” y que siempre creyó en su recuperación. Por ahora, las palabras del exseleccionado uruguayo no se equivocan: Vargas mostró otra cara, se reencontró con el gol y dejó buenas sensaciones dentro de la cancha.
Con este nuevo envión anímico, Eduardo Vargas espera seguir sumando minutos, goles y protagonismo en Nacional. La exigente hinchada tricolor ya lo vio celebrar, y ahora espera que esta sea la primera de muchas alegrías que el chileno pueda entregar. Su historia en Uruguay, al parecer, recién comienza a escribirse con letras más positivas.
