Rival de la U en Copa Libertadores sufre tensión extra futbolística

En el horizonte del próximo enfrentamiento entre Universidad de Chile y Estudiantes de La Plata, en el marco de la Copa Libertadores 2025, una sombra de incertidumbre se cierne sobre el club argentino. Una investigación judicial por presunto “lavado de dinero” ha sacudido los cimientos de la institución, añadiendo un elemento de tensión extra futbolística al ya de por sí trascendental encuentro.
Rival de la U en Copa Libertadores en aprietos
La lupa de la justicia se posa sobre Foster Gillett, un magnate estadounidense vinculado a Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes. El fiscal Guillermo Marijuan ha iniciado una investigación formal por “presuntas irregularidades en transferencias de futbolistas”, lo que ha desatado una ola de preocupación en el club.
Aunque Estudiantes niega su implicación directa en las supuestas irregularidades, reconoce que la investigación los obliga a extremar las precauciones legales. La sombra del “lavado de dinero” planea sobre el club, generando un clima de incertidumbre que podría afectar su desempeño en el campo.
La continuidad de Juan Sebastián Verón como presidente de Estudiantes se encuentra en entredicho, ya que su permanencia en el cargo está ligada a la inversión económica prometida por Gillett. Si la investigación judicial obstaculiza la llegada de estos fondos, el futuro de Verón en el club se torna incierto.
Regreso al torneo internacional
Mientras tanto, Universidad de Chile se prepara para su regreso a la Copa Libertadores, un torneo que exige concentración y estabilidad. El enfrentamiento con Estudiantes, programado para el 8 de abril, se presenta como un desafío deportivo de gran envergadura, al que ahora se suma el factor de la investigación judicial.
La situación legal de Estudiantes añade un elemento de incertidumbre al partido. Mientras los equipos se preparan para el duelo en el campo, los dirigentes de Estudiantes deberán lidiar con las implicaciones legales de la investigación.